miércoles, 20 de febrero de 2008

Pacific Blue

Segunda entrega de las desventuras pascuenses de esta semana… Por fin, tras comenzara a creer que todo nuestro infortunio estaba enfocado a no poder visitar a los Moais, hemos conseguido realizar 2 excursiones…


Las vistas de la isla son memorables, pero nos ha tocado en suerte un grupo de turistas tintines, y un guía llamado Richard que habla castellano como Jonathan Ritchman (quien no lo conozca, que se baje algún hit suyo como “Vampiresada”), y que un día se compro la National Geographic en el que debía aparecer un articulo sobre Isla de Pascua y tras leérselo se diría, “Venga a ejercer de guía”… El caso es que es un poco pelele, y además esta mas empanado de lo que cabria esperar, pero no es muy caro, y a nosotros, armados con la Lonely Planet, nos basta…


Un nombre no muy alentador para un monumento...


El caso es que aquí es todo un misterio la manera en la que los antiguos pascuenses movieron bloques de 9 metros de piedra a varios kilómetros de distancia, y cada arqueólogo tiene una teoría diferente, que si arrastrándolo a lo bruto, que si en un trineo hecho con madera, que con canicas de piedra, rodándolos sobre troncos, etc… Pero tras ver todo lo que he visto esta semana, me apunto a la teoría más descabellada que existe, pero que ahora tiene toda la lógica… Los Moais los movieron los extraterrestres sin ninguna duda… Cuado ves lo mal que trabajan, lo lentos que son, y la desgana que portan habitualmente, lo que resulta totalmente ilógico es pensar que los antepasados de esta gente se pasase 20 meses arrastrando una piedra por media isla, teniendo sitios en los que estar la sombra fresquitos, o planeando como clavársela a los futuros colonos

El caso es que en el día de hoy, tras haber visto la playa de Anakena, que te presenta una playa en pleno pacifico, con agua cristalina, y restos arqueológicos y chiringuitos a menos de 50 metros, hemos suspendido la excursión de hoy para ir a nuestro ritmo y ver si cogemos un poco de color que estamos mas blancos que la leche, aunque sea color rojo…




Hobbie numero uno de la zona, ver como crece la hierba...


Poco más que destacar, mas noticias desde Santiago, o desde el centro de Atacama.

Besos.

lunes, 18 de febrero de 2008

Orgullo patrio…

El domingo de Pascua de 1722, el almirante holandés Jacob Roggeveen llegaba por primera vez a la Isla de Pascua, descubriendo la vistosa civilización que la poblaba… 24 horas mas tarde zarpaba de nuevo y en su diario apuntaba que los isleños, aunque amistosos, eran ladrones expertos que les habían choriceado varios manteles y sombreros…

En 1744, el capitán británico James Cook llegaba a la isla después de meses cruzando el Pacifico. La tripulación, terriblemente afectada por el escorbuto (enfermedad asociada a la carencia de vitaminas) se vio obligada a negociar con los isleños para conseguir algo de verdura y fruta, pudiendo embarcar únicamente algunos cestos de boniatos. Tras algunos días de su marcha de la isla, los marineros fueron conscientes de que habían sido timados por los Pascuenses, los cestos de boniatos solo portaban unos pocos tubérculos que cubrían cestas cargadas con piedras…

Y ahora en 2007 llego yo a la isla, y debe ser que tengo la misma cara de gilipollas europeo que el resto de colonos de hace varios siglos porque allí donde voy o me la intentan liar o directamente me cobran un ojo de la cara…

Remitiéndome a los hechos, os narro las desventuras turísticas de estos últimos días. Sábado 16, llegamos a la isla y nos vienen a recoger al aeropuerto con sendos collares de flores un nativo un tanto seco y gilipollas que nos lleva al hotel, una vez allí tengo mi primer contacto con la dueña/jefa del establecimiento, también seca y gilipollas, lo que me hace pensar que es familia del conductor aunque ella no parece ser un aborigen, solo enana y fea… Bueno, comienza la aventura del Check In, nos toca en suerte la habitación 26, ¿dónde esta la llave? Vaya usted a saber, la señora encarga al conductor, reconvertido en botones, que nos lleve a la habitación, busque la llave y nos la entregue…

OK, llegamos a la habitación y la llave que debía de estar aquí no esta ¿? El chaval se marcha a buscarla y ahí nos quedamos Bea y yo, familiarizándonos con la habitación (105 dólares la noche y las paredes de madera prensada no cierran bien dejando entrar la luz por las esquinas…). 15 minutos después, vemos que no tenemos el mando del aire acondicionado y que solo hay una toalla. Voy a recepción y pregunto… Bien, la llave la tienen las hipopótamas de la limpieza, ahora nos la llevan, la toalla vete tu a saber, lo mismo es que aun no están secas y por eso solo han dejado una, y el mando del aire cuesta 30 dólares cada día (como un mes de Digital +, sospecho que el autentico propietario del local es el grupo PRISA)…

Regreso a la habitación, y me dispongo a esperar 30 minutos más antes de realizar mi segunda escapada a recepción… “¿No te han llevado la llave aun?” me pregunta cuando me ve, que te dan ganas de decirla, claro que si me la han traído pero es que me gusta venir a tocar los cojones, señora… Bien, la señora ve tan bien como yo que las de la limpieza se han marchado a casa y que la llave no esta… Revuelve la recepción, hace un poco el paripe y pregunta al cielo donde estarán las llaves (matarilerilerile), y ante mi cara de poker se decide a darme un matojo con tres llaves y un 26 apuntado y me dice que me lo lleve y mire a ver si funciona alguna, y que tenga mucho cuidado de no perdérselas… Por el camino veo que todas son iguales, y cuando llego compruebo que abren y cierran, cojonudo tras una hora de espera por fin me puedo ir a comer…

Empieza el show de los restaurantes y damos una pausa al del hotel…

Llegamos al primer restaurante, precios altísimos pero más bajos que los otros dos que hemos visto, entramos y nos sentamos… Y aquí empieza el autentico aprendizaje del rito de espera y frustración del restaurante pascuense… El cliente, por norma general debe esperar una media de 20 minutos (y no es broma) para recibir la carta (si tienes la suerte de que tengan carta) y pedir, 40 minutos para que traigan la comida, y otros 20 minutos desde que pides la cuenta hasta que te la traen…

Cara de circunstancia Moai ante tanto choriceo...

Los tiempos de espera molan, pero no son el centro de esta liturgia, el autentico espíritu se encuentra en pedir y recibir alimentos, todo un desafío solo apto para los mas tranquilos, en la carta encuentras 6 tipos de pescados, 2 de carne y pollo, mas 4 acompañamientos (papas fritas, puré, arroz, etc)… OK, no hay mucho donde elegir y te lleva poco la elección, pero el ritual obliga a que el 70 % de la carta no este disponible, y el turista que sufría para elegir entre tan “extensa carta” ahora pueda ir descartando uno a uno todos los platos hasta descubrir que solo queda atún o carpaccio de atún…

Vale, tienes hambre y ya estas ahí, venga, atún mismamente, y es aquí donde sobreviene la sorpresa de la trama, aunque ya habías recibido una pista previamente (como en las novelas de Chuck Palahniuck, que guay!!) ¿Por qué creéis que había dos platos disponibles?, efectivamente, para poder equivocarse y perder 20 minutos haciéndote el carpaccio, en vez del atún a la plancha. Esto a su vez explica que aquí la comida cueste el doble que en el resto del país (tienen que cocinar el doble, lo que has pedido y lo que no tambien), y no porque los pascuenses se hayan dedicado desde tiempos inmemoriales a clavársela a todo europeo que ha tenido la suerte o la desgracia de venir, como yo sospechaba.

El final de la ceremonia es la llegada de la cuenta, en la cual te incluyen las propinas directamente (un 10%) ya que como es obvio no esperan recibirlas…

Con la tripa llena y el bolsillo resentido, llega el momento de ir a la lavandería, la cultura nómada que nos acompaña desde hace una semana nos impide lavar ropa ya que no da tiempo a que la laven y se seque, y solo contamos con pocas oportunidades para proceder a este servicio. El problema que te surge en estos sitios es que los de la lavandería también quieren ir a comer al restaurante (vamos, que tienen sus necesidades), y por lo tanto tras pesarte la ropa, multiplican el gramo de calzoncillo zurrasposo por el precio actual de la cocaína, y lo elevan al cuadrado… Resultado: la próxima vez o me planteo llevar un taparrabos como algunos locales que parece que van disfrazados, o comprarme ropa nueva que me sale mas a cuenta, o ponerme los calzoncillos y calcetines del revés…

Cada vez mas ligero de pasta me desplazo de nuevo al hotel, ya que es allí donde nos han ofrecido las excursiones para la isla mas baratas, la señora (que cada vez alberga mayor parecido a la enana de la película Polstergeis) nos propone tres excursiones para domingo, lunes y martes, indicándonos que no sabe cual nos tocaría el domingo pero que con seguridad seria la mas larga, al sur de la isla. Nos informa de que necesitamos vianda (merienda) y que nos lo confirma por la noche o por la mañana del día siguiente.

Confiados en nuestra racha de suerte, salimos a ver la clausura de las fiestas locales (Tapati Rapa Nui) y la elección de la reina juvenil de la Isla, todo un evento… a la que vamos, como buena fiesta local, los tenderetes nos ofrecen la posibilidad de realizar el rito de restaurante pero en versión rápida… Aquí descubrimos la variedad ritual de “la empanadilla rusa”, en la que tú pides la empanadilla de lo que prefieras, y en vez de decirte que no hay, el dependiente desaparece y te trae la empanadilla que le sale a él de los cojones, total como hasta que la muerdas no vas a saber de que va… El tío del puesto va de simpático, me habla de Zamorano, y me pregunta como va el Villareal ¿¿comorr??... Ni puta idea de cómo va, pero le digo que bien, y ganas me dan de preguntarle si sabe que Guti es gay…

El espectáculo previo a la coronación es tan patético que ni Bea ni yo podemos evitar descojonarnos con el himno que un nativo hippie pasado de vueltas ha realizado para la fiesta… En la entrega de diplomas y posterior coronación descubrimos el autentico problema de esta gente… La endogamia ha hecho mella en esta población, y es que en total salieron mas de 50 personas a recoger diplomas y de entre todos los ganadores, contamos únicamente 4 o 5 apellidos diferentes (Pacomo, Tuki, Paté, las familias mas populares)…

Hora de dormir, y al despertar descubrimos sin gran asombro que no hay corriente eléctrica en la habitación, nos vestimos y salimos al desayuno, donde descubrimos un sistema alternativo al buffet de todos los hoteles del mundo… Bea lo bautiza como “la cartilla de racionamiento” y es que te ponen un plato con la comida contada para que no te excedas, que solo has pagado 105 dólares…

Me acerco a recepción y pregunto por la enana de Polstergeis, y llega a las 9:30, 30 minutos antes de la eventual excursión, por lo que flipo bastante… Lo cierto es que desde el primer minuto en el hotel estaba a malas con la enana, desde el primer minuto, y estaba llegando a un punto de tensión extremo… 9:30, voy a recepción y ahí esta, y como sospechábamos, no hay excursión, y no es por su culpa, es que el guía no ha llamado…

Tomo aire, trato de explicarle que nos había indicado que hoy teníamos por A o por B excursión y que si existía esta posibilidad de que no hubiese excursión ella no la había indicado… Me contesta que si no me gusta que me vaya, a lo que le digo que efectivamente me marcho, que el servicio es vergonzoso, una hora para que me den la llave, y encima sea yo quien tiene que ver si es la llave correcta, que tras 24 horas secándose, sigo sin toalla, que no tengo luz en la habitación y que por su ineptitud he perdido todo el día… Y me contesta “Te diré que los únicos que vienen con estos aires a quejarse, sois los españoles”… Quien me conoce sabe que jamás me he considerado un patriota precisamente, pero estas cosas me tocan hondo, que una enana retrasada, muerta de hambre, paleta e inútil, tras tocarme los cojones de una manera tan obvia durante casi 24 horas, venga a decirme que voy de señor feudal es el colmo.

Aprieto los dientes y le digo “Efectivamente los españoles somos muy exigentes ¿Y sabe por que? Porque somos europeos, y entendemos que al pagar 105 dólares se nos va a dar un servicio de calidad europea, no esta puta mierda de servicio vergonzoso” a lo que la señora se vuelve dando me la espalda y se pone a hablar en Rapa Nui (el idioma, de origen polinesio, vete tu a saber que dicen), por lo que entendiendo el gesto como una ruptura de negociaciones, y curándome en salud (al no saber lo que dicen) me he vuelto hacia Bea y he comenzado a mentar a la hija de la grandísima puta que parió a la muerta de hambre de la enana, así como me acuerdo de la expedición peruana que en 1862 rapto a 1000 isleños para llevarlos a trabajar como esclavos en una isla próxima a Perú con yacimientos de guano, y me planteo si no cabían muchos mas en el barco…

Otros turistas argentinos y chilenos me han preguntado que pasaba y han coincidido conmigo en muchos puntos de mi frustración (seguían esperando que se secaran las toallas)

Según lo pactado, recojo y me piro a un hotel algo mas caro, con paredes de verdad, cucarachas como en el otro (para no perder costumbre) y un recepcionista mucho mas cordial… Os contaremos como acaba, si también este nos sale rana…

Por la tarde ya podemos admitir que hemos empezado a disfrutar de la isla a fondo y nos hemos ido andando a un conjunto de moais cercano a ver el atardecer…

Lo cierto es que me gusta este tipo de sitios y de situaciones donde no todo es comer y dormir, aunque la acción pase por la confrontación directa con una enana pedorra… Las aventuras y las dificultades son lo mejor de estos viajes…

Españoles!!! (Y algún portugués) un patriota se despide desde nuestras antiguas posesiones de ultramar… Dios tenga en su gloria a los colonos…

domingo, 17 de febrero de 2008

4 despegues y 4 aterrizajes después…

Hola a todos, familiares y amigos, os alegrara saber que tras un tour no contratado por los mejores aeropuertos de Chile, tras mas de 10 horas de avión, 4 despegues y sus correspondientes 4 aterrizajes, hemos conseguido llegar a Isla de Pascua…


Debo decir que todo ese periplo no lo hemos hecho de continuado sino que hemos disfrutado de unas cuantas horas de esparcimiento en Santiago de Chile, suficientes como para poder ver la tristemente popular Casa de la Moneda y la Plaza de Armas…



El señor Allende.

Hoy ha sido un día de descubrimientos para Bea, se ha enterado de que Allende murió durante el bombardeo en la Casa de la Moneda (había leído que se suicido debido al acoso sufrido por los golpistas), y también se ha enterado de que a Guti le molan los tíos… Lo cierto es que esto ultimo a priori no tiene nada que ver con el viaje excepto porque sale en los periódicos nacionales, y en la tele chilena los corresponsales que retransmiten el Juventus – Roma (puta mierda de partido) se descojonan de las fotos de Guti y dicen que España entera esta conmocionada (no se yo)…

Volviendo a Santiago, os diré que esta llena de frikis, la Plaza de Armas se parece a la calle de los profetas que sale en La Vida de Brian, llena de personajes sospechosos profetizando el advenimiento del Apocalipsis, o simplemente difundiendo la palabra de Jehová, tela marinera…

Y hoy por fin el plato fuerte de la semana, Rapa Nui (Nuiiiii), que de entrada sorprende por lo verde del paisaje, el precario estado de los servicios, y el ritmo caribeño con el que hacen todo en la isla…

La isla mola (y eso que aun no hemos visto nada a nivel arqueológico) pero los precios son altísimos y la calidad bastante mala… Para mas INRI, Bea ha tenido contacto con la primera cucaracha de la isla descubriendo (lo que esta aprendiendo esta mucha en este viaje) que son de tamaño XXL, esto significa que la das con la zapatilla y la cucaracha en vez de morir se te pone chula… Veras cuando se entere de que vuela (no he querido reventarle la sorpresa)…

Tenemos 4 días para ver una isla que se ve en dos, por lo que esperamos que podamos relajarnos, ya sea con o sin cucarachas…